En el Marketing Promocional, como ya hemos comentado en varias ocasiones debe adaptarse a diferentes públicos, ofreciendo aquello que logre captar la atención del cliente fidelizado y potencial, lanzando al mercado un producto con un valor añadido, en este caso, una experiencia.

Hoy hablaremos de las experiencias, el término “experiencias” engloba una gran variedad de posibilidades, nosotros nos centraremos en las de Salud y Bienestar.

Lo primero que tenemos que tener establecido en el momento de valorar qué experiencias ofrecer a cada cliente, es a quién queremos dirigirnos y la imagen de marca que queremos transmitir, ambas deben ir estrechamente ligadas, sino no obtendremos grandes resultados de nuestro trabajo de campaña.

La empresa TIRITAS, es un ejemplo que utilizaremos hoy, promoción que hemos empezado este mes de mayo (www.latiradeexperiencias.com). El valor añadido por la compra de una caja de Tiritas edición especial, es disfrutar de una experiencia Salud y Bienestar.

Las experiencias ofertadas en este caso, son aquellas dirigidas al cliente comprador, consumidor final o no, por lo que nos dirigimos a hombres y mujeres adultos. Al tratarse de un producto sanitario, es una buena opción ofrecer experiencias tales como clases de reiki y yoga, masajes, acceso a un spa, sesiones de fisioterapia y osteopatía,…

Este tipo de promociones deben estar limitadas en tiempo, para darle más importancia y generar un estímulo de compra al consumidor.

Una vez logrado nuestro objetivo, solo nos quedará realizar una buena gestión de la promoción y sobre todo, una atención al cliente de calidad.